Alguna vez amaste en Buenos Aires
Fotografía: San Telmo. Bettina Dávalos. Son esos días en los que hace tanto frio Que no se siente para nada la baja temperatura Porque él te dió su enorme campera A cambio de un pequeño y fino suéter de hilo, Cuello a la base, color chocolate, Que traías solamente por si acaso El precioso Sol se fuese a descansar. Mientras se abrazan en un vagón de la línea B, Vos vas encogida, casi envuelta, Y él, agigantado en algo que parece una pupera, Te mira tiernamente y conversa A cambio de una sola de tus amplias sonrisas. Completan la postal con una carcajada Que se desarma cuando el subte llega ruidosamente A la parada para combinar con el siguiente tren Justo debajo del Obelisco. La gente pasa apresurada por doquier, Caminando en distintas direcciones, Al tiempo que ustedes deciden anticipar el fin del viaje Y prolongar la luz de las velas, A cambio de un paseo nocturno por Lavalle ...